¿Qué tipo de operaciones se prescriben para las varices?

Los métodos de tratamiento conservadores son eficaces sólo en las etapas iniciales de las venas varicosas. Y dado que los primeros signos suelen pasar desapercibidos, la patología continúa desarrollándose, reduciendo la eficacia de los fármacos utilizados. Si los síntomas empeoran significativamente, la única opción para eliminar las venas varicosas es la cirugía. Un lugar especial lo ocupa la rehabilitación, que requiere que los pacientes cumplan con las recomendaciones médicas.

Indicaciones para la cirugía

¿Para qué síntomas se prescribe la cirugía de varices

Si hay venas varicosas, en determinados casos se prescribe tratamiento quirúrgico.

En particular, la intervención quirúrgica está indicada para pacientes con:

  • daño vascular extenso, que puede determinarse mediante examen visual;
  • síntomas en forma de hinchazón, dolor constante y sensación de pesadez;
  • riesgo significativo de tromboflebitis, úlceras tróficas.

La cirugía de varices es apropiada cuando el uso de medicamentos no produce los resultados deseados. Es importante evitar que la enfermedad se desarrolle hasta el punto en que el tratamiento quirúrgico sea inútil.

Para algunos pacientes, la cirugía de venas varicosas en las piernas puede estar contraindicada.

Contraindicaciones

La cirugía en la última etapa suele ser inapropiada; en consecuencia, las venas varicosas se tratan con diversos fármacos. Ayudan a reducir ligeramente la gravedad de la enfermedad, pero no pueden eliminarla por completo.

Pacientes que padecen:

  • enfermedades inflamatorias de la piel en el lugar de desarrollo de la patología venosa (por ejemplo, erisipela o eccema);
  • trastornos cardiovasculares (enfermedad de las arterias coronarias, hipertensión, insuficiencia cardíaca);
  • forma aguda de flebitis;
  • enfermedades infecciosas (la cirugía es posible después de la recuperación);
  • trombosis venosa, embolia pulmonar (antecedentes);
  • Obliterando la aterosclerosis de los vasos de las extremidades inferiores.

El tratamiento quirúrgico para eliminar las varices está contraindicado en pacientes mayores de 70 años, así como en mujeres embarazadas.

Preparándose para la cirugía

Una consulta con un flebólogo le ayudará a prepararse adecuadamente para el próximo tratamiento quirúrgico. El paciente tiene derecho a plantear cualquier duda que le interese respecto a la operación.

También debe describir los síntomas presentes con la mayor precisión posible, hablar sobre una posible intolerancia a ciertos medicamentos y asegurarse de informar sobre los medicamentos que está tomando actualmente.

El médico tratante remite al paciente a una serie de procedimientos de diagnóstico:

  • análisis de sangre y orina;
  • fluorografía;
  • electrocardiografía;
  • ecografía dúplex.

La etapa preparatoria requiere el cumplimiento de ciertas condiciones:

  1. 3 días antes de la cirugía, el paciente debe seguir una dieta libre de escorias, es decir, están prohibidos los productos fritos, salados, picantes, así como cárnicos y harinosos.
  2. La última ingesta de comida y líquidos es 8 horas antes de la cirugía.
  3. Durante al menos 3 días debes olvidarte del alcohol y del tabaco.
  4. Será necesario eliminar el vello de la pierna en la que se realizará la operación y utilizar una navaja.
  5. Si existen úlceras, hematomas o cualquier daño en la piel, debe comunicárselo a su médico.

Si el paciente conduce un automóvil, debe hacer arreglos para que alguien cercano o familiar lo recoja después del alta. Actualmente está prohibido conducir.

Al prepararse para la cirugía, el paciente se interesa por saber qué tipo de intervención quirúrgica le está indicada y cuánto cuesta dicho tratamiento. Si a un paciente se le programa una cirugía de venas, el precio está influenciado por muchos factores: la etapa de la enfermedad, la longitud del vaso afectado por las venas varicosas, la anestesia, etc.

Métodos para eliminar las venas varicosas.

Dado que existen muchos tipos de tratamiento quirúrgico para las varices, la elección de una técnica específica se realiza en función de los datos de diagnóstico. En algunos casos, el vaso venoso se extirpa total o parcialmente, en otros, las venas deformadas debido a las venas varicosas se sellan o estrechan con una sustancia especial.

Flebectomía

Un tipo de tratamiento quirúrgico durante el cual se extirpan áreas de los vasos sanguíneos donde hay venas varicosas. Después de la extracción, el movimiento de la sangre se realizará a través de venas profundas.

La operación se realiza de la siguiente manera:

  1. Una vez que la anestesia ha hecho efecto, el cirujano realiza pequeñas incisiones (de hasta 5 mm).
  2. La vena se extrae con una sonda especial, después de lo cual se reseca el área afectada.

La duración de la flebectomía es de 1 a 2 horas. Posteriormente queda una pequeña cicatriz en el sitio operado.

Microflebectomía

microflebectomía para venas varicosas

Una excelente alternativa al método anterior. La esencia de la técnica es que no es necesario realizar incisiones de 5 mm. Una pequeña punción es suficiente para realizar todas las manipulaciones necesarias con la vena. Además, la recuperación en este caso es mucho más rápida y no quedan cicatrices.

Todo tipo de operaciones realizadas para eliminar las varices de las piernas salen bien y causan complicaciones en casos muy raros.

Gracias a esta técnica de punción es posible eliminar incluso las varices más grandes.

Desnudándose

Es un tipo de flebectomía. Con su ayuda se extrae el tronco de la vena safena mayor. El cirujano extrae el vaso afectado por las venas varicosas a través de una pequeña incisión, utilizando una sonda especial. Se realizan incisiones en la zona del pliegue inguinal y el tobillo en el interior.

El desmontaje ocurre:

  • parcial – sólo se extirpa una parte del vaso venoso;
  • total – la vena enferma se estira junto con sus pequeñas ramas.

Realizar tales manipulaciones requiere el máximo cuidado por parte del médico. Si queda al menos un afluente sin cruzar, el riesgo de recaída aumenta significativamente.

Escleroterapia

Esta es una cirugía para eliminar las varices progresivas, que es mínimamente invasiva y no requiere incisiones. Las acciones del cirujano tienen como objetivo estrechar la luz del vaso enfermo hasta su total desaparición.

Para ello, se inyecta un esclerosante en una vena. El fármaco promueve daños irreversibles en las paredes del vaso, seguido de un crecimiento excesivo de la luz.

Generalmente se utilizan medicamentos especialmente diseñados para este fin.

La escleroterapia tiene varias ventajas:

  • el procedimiento se puede realizar de forma ambulatoria;
  • al paciente se le permite regresar a sus actividades cotidianas al día siguiente;
  • no hay necesidad de anestesia general;
  • No quedan cicatrices tras la operación.

Un punto negativo es la probabilidad de que se vuelvan a formar venas varicosas. La enfermedad puede afectar las venas ubicadas al lado de aquellas donde se inyectó el esclerosante. En un procedimiento se realizan hasta 10 inyecciones y la duración del tratamiento es de aproximadamente una hora.

Cabe decir sobre los tipos de escleroterapia:

  1. Espuma. El fármaco utilizado, en contacto con el aire, forma espuma que llena la cavidad del vaso. El cierre de la luz se produce en un corto período de tiempo e incluso una pequeña cantidad de esclerosante es suficiente. Además, para obtener resultados satisfactorios se realizan 1-2 procedimientos, durante los cuales se inyecta la espuma un máximo de 3 veces.
  2. Microescleroterapia. La técnica es apropiada en las etapas iniciales de la enfermedad.
  3. Ecoesclerosis. Recetado para lesiones de venas profundas. La inyección se realiza mediante un escáner de ultrasonido, que permite distinguir claramente el lugar de inyección del esclerosante, determinar con precisión la cantidad de medicamento y evitar consecuencias indeseables.

Las manipulaciones realizadas son prácticamente indoloras y posteriormente los pacientes se recuperan rápidamente.

Coagulación con láser

Este método de tratamiento de las venas varicosas, llamado coagulación (obliteración) con láser endovenoso (endovasal), implica el uso de un dispositivo especial: un láser LED.

Se inyecta en la vena afectada y, gracias a su radiación, se sueldan las superficies internas del vaso. La sangre continúa circulando por venas sanas y el bienestar del paciente mejora.

Ventajas de la coagulación con láser:

  • ausencia de cicatrices y manchas de la edad en la piel;
  • realizado de forma ambulatoria durante 1-2 horas;
  • se utiliza anestesia local;
  • las manipulaciones se realizan bajo el control de una máquina de ultrasonido;
  • corto período de recuperación.

El éxito de la operación se podrá juzgar finalmente después de 3 meses. El uso de láser garantiza un alivio total de la enfermedad sin riesgo de recaída.

El período de rehabilitación después de la extirpación de las venas.

Después de la cirugía, el paciente debe seguir ciertas reglas que minimizarán el riesgo de complicaciones y acelerarán la recuperación:

¿Cómo se realiza la cirugía de varices
  1. Se recomienda el uso de medias de compresión. El médico tratante le ayudará con su elección. Al principio (aproximadamente 5 días), la ropa interior no se quita antes de acostarse y, posteriormente, se permite su uso solo durante el día.
  2. Para apoyar los vasos sanguíneos, se debe prohibir el alcohol y fumar, ya que la nicotina y el alcohol son una de las causas más comunes de las venas varicosas.
  3. Debes abstenerte de realizar una actividad física excesiva. Incluso las lesiones menores en las extremidades inferiores suponen un peligro. Si el paciente anteriormente practicaba deportes, podrá volver a practicarlo después de 1,5 a 2 meses.
  4. Para evitar recaídas, los procedimientos con agua no deben estar calientes. Están contraindicados la sauna, el baño de vapor y el solárium.
  5. No se pueden realizar procedimientos cosméticos en las áreas operadas.
  6. Será útil realizar ejercicios terapéuticos.

Para evitar que las varices vuelvan a aparecer después de la cirugía, durante el período de rehabilitación deberá tomar los medicamentos recetados por su médico para ayudar a que los vasos se recuperen. No es deseable cambiar la dosis de los medicamentos a su propia discreción, lo que conlleva consecuencias indeseables. Si aparece algún signo de deterioro, es importante acudir inmediatamente a un flebólogo.

El tipo de intervención quirúrgica se determina según las características individuales de la enfermedad.

Posibles complicaciones después de la cirugía.

Ningún especialista puede garantizar la ausencia total de efectos secundarios tras la cirugía. Pueden ocurrir complicaciones dependiendo del método de tratamiento quirúrgico que se utilizó.

La flebectomía y la extracción pueden resultar en:

  • entumecimiento en la parte inferior de las piernas;
  • disminución de la sensibilidad de la piel;
  • síndrome de dolor;
  • sangría;
  • hematomas;
  • supuración de la zona operada.

Después de la escleroterapia pueden aparecer:

  • hinchazón del tobillo y del pie;
  • pigmentación;
  • descamación y picazón;
  • sensaciones dolorosas;
  • quemadura de piel.

Si se utilizó un LED láser, la formación de:

  • inflamación;
  • oscurecimiento de áreas de la piel;
  • hematomas menores;
  • dolor persistente.

La complicación más peligrosa de cualquier procedimiento quirúrgico es la trombosis. Pero su aparición se observa en casos raros. Con la cirugía mínimamente invasiva, el riesgo de formación de coágulos sanguíneos es bastante bajo.

Gracias al tratamiento quirúrgico, es posible deshacerse con éxito de una enfermedad grave. Lo principal es encontrar un especialista calificado y no ignorar las recomendaciones médicas sobre el período de recuperación.